De venta en la Herbosura. El Sporting apuesta por introducir su marca en nuevos productos de calidad. En esta ocasión ha apostado por una línea de vino ecológico.
Con Denominación de Origen La Mancha, sus dos variedades de "vino tranquilo", tanto tinto como blanco, son elaboradas con uvas procedentes de viñedos ecológicos, lo que supone un proceso de mantenimiento de la viña y elaboración del vino sin utilizar ningún componente químico ni en viñedo ni en bodega.
La vendimia es seleccionada en viñedo en cestas de 15 kilogramos y en bodega se vuelve hacer una preselección en cinta para descartar las uvas en mal estado.
La fermentación se lleva a cabo en tanques de hormigón, Se busca con ello mantener la frescura y que el vino resultante tenga los mayores aromas varietales posibles, elaborando vinos frescos, aromáticos y sin un elevado porcentaje de alcohol para poder llegar a todo tipo de públicos, destacando en ellos la frescura y fruta, manteniendo y cuidando al máximo los orígenes del vino.
Además se sella y valora la huella de carbono, la cual es el cálculo aproximado del CO2 que se envía a la atmósfera desde que el agricultor va al viñedo a principios de año hasta que el vino llega embotellado al cliente final, contando todo el proceso de transporte.
Con Denominación de Origen La Mancha, sus dos variedades de "vino tranquilo", tanto tinto como blanco, son elaboradas con uvas procedentes de viñedos ecológicos, lo que supone un proceso de mantenimiento de la viña y elaboración del vino sin utilizar ningún componente químico ni en viñedo ni en bodega.
La vendimia es seleccionada en viñedo en cestas de 15 kilogramos y en bodega se vuelve hacer una preselección en cinta para descartar las uvas en mal estado.
La fermentación se lleva a cabo en tanques de hormigón, Se busca con ello mantener la frescura y que el vino resultante tenga los mayores aromas varietales posibles, elaborando vinos frescos, aromáticos y sin un elevado porcentaje de alcohol para poder llegar a todo tipo de públicos, destacando en ellos la frescura y fruta, manteniendo y cuidando al máximo los orígenes del vino.
Además se sella y valora la huella de carbono, la cual es el cálculo aproximado del CO2 que se envía a la atmósfera desde que el agricultor va al viñedo a principios de año hasta que el vino llega embotellado al cliente final, contando todo el proceso de transporte.
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